Marcas que se transforman en vida.
El concepto de economía circular comenzó a escucharse desde los años 70, refiriéndose a un sistema cerrado de interacciones entre economía y medioambiente. A pesar de que este término no es nuevo, en la actualidad ha cobrado relevancia por las crisis del cambio climático. Dicho sistema ha sido aplicado a las marcas que hoy se conocen como circulares, tendencia a la cual todas las marcas deberían unirse en pro del planeta.
Para entender más acerca de las marcas circulares, debemos comenzar con las lineales. La mayoría de los productos que consumimos siguen un modelo económico lineal en el cual, los recursos son procesados y una vez que han cumplido su función, desechados. En pocas palabras, consisten en tomar, hacer y desechar, además, disponen de grandes recursos, consumen mucha energía y contaminan el ambiente.
Con la crisis que enfrentamos a nivel global por el cambio climático, desde hace varios años diversas marcas han tratado de aplicar la economía circular, pero, ¿cuál es la diferencia con la lineal?
La economía circular es reparadora y regenerativa; su principal propósito es lograr que los productos, componentes y recursos en general mantengan su utilidad y valor en todo momento.
Los principios de la economía circular son:
- Diseña para reusar.
- Enfócate en la cadena de producción.
- Transforma productos en servicios.
- Equilibra los flujos de recursos renovables y controla las existencias finitas.
- Optimiza el uso de los recursos por medio de la rotación, componentes y materiales de máxima utilidad.
La economía circular es considerada dentro de las diez tendencias en el branding durante el 2019. Cada vez más marcas reubican sus esfuerzos en pro al medio ambiente, al tiempo que los nuevos consumidores buscan marcas que conecten con sus ideologías, así como las experiencias que éstas ofrecen. Los productos o servicios que alineen sus esfuerzos con la responsabilidad con el medio ambiente resaltarán dentro de un mercado donde aún predomina la economía lineal que conlleva efectos negativos para el planeta.
Estas son algunas de las marcas que han logrado insertar la economía circular dentro de sus valores con gran éxito:
Timberland
Una de las marcas favoritas de los consumidores de botas creó una alianza con los neumáticos Omni, los cuales, les dan una vida útil a los neumáticos viejos enviándolos a las plantas de Timberland donde los convierten en polvo para posteriormente transformarlo en hojas de caucho, material que se encuentra en las suelas.
Heineken por su parte, anunció la creación de sus botellas a partir de materiales reciclados, mientras que Levis recolecta botellas de plástico, pantalones y zapatos usados de cualquier marca con el fin de transformarlos en edificios, material de relleno y fibras para la fabricación de nuevas prendas.
En un mercado inmenso existen muchas marcas que aún no se han sumado a la tendencia de la economía circular. Algunas de las barreras son:
- Insuficientes casos de negocios
- Alto costo logístico para reclamar bienes usados
- Falta de comprensión o educación del liderazgo ejecutivo
- Falta de comprensión o educación del consumidor
De acuerdo a una encuesta realizada por Statista, 78% de los mexicanos demostraron empatía hacia las marcas y compañías que se hacen responsables del medioambiente. De igual manera, el alza en tendencias de búsqueda en México es de 82%.
En un contexto social donde los efectos del cambio climático son cada vez más evidentes, es primordial unirse ya a esta tendencia. ¿Y tú ya formas parte de la economía circular?
¡Nos vemos en la red!
Equipo Kanji